martes, 21 de febrero de 2012

Los Derechos del Niño, por Mafalda

Hace años. a pedido de la UNICEF, Joaquin Lavado  "Quino" comentó a través de su histórico personaje "Mafalda" los Derechos del Niño. La brillantez de su arte es evidente... ahi les va para que recuerden a los niños y a Mafalda, un poco de frescura:

Principio 1

El niño disfrutara de todos los derechos enunciados en esta Declaración. Estos derechos serán reconocidos a todos los niños sin excepción alguna ni distinción o discriminación por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opiniones políticas o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento u otra condición, ya sea del propio niño o de su familia
Principio 2
El niño gozará de una protección especial y dispondrá de oportunidades y servicios, dispensado todo ello por la ley y por otros medios, para que pueda desarrollarse física, mental, moral, espiritual y socialmente en forma saludable y normal, así como en condiciones de libertad y dignidad. Al promulgar leyes con este fin, la consideración fundamental a que se atenderá será el interés superior del niño.

Principio 3
El niño tiene derecho desde su nacimiento a un nombre y a una nacionalidad


Principio 4
El niño debe gozar de los beneficios de la seguridad social. Tendrá derecho a crecer y desarrollarse en buena salud; con este fin deberán proporcionarse, tanto a él como a su madre, cuidados especiales, incluso atención prenatal. El niño tendrá derecho a disfrutar de alimentación, vivienda, recreo y servicios médicos adecuados.

Principio 5
El niño física o mentalmente impedido o que sufra algún impedimento social debe recibir el tratamiento, la educación y el cuidado especiales que requiere su caso particular

Principio 6
El niño, para el pleno y armonioso desarrollo de su personalidad, necesita amor y comprensión. Siempre que sea posible, deberá crecer al amparo y bajo la responsabilidad de sus padres y en todo caso, en un ambiente de afecto y de seguridad moral y material; salvo circunstancias excepcionales, no deberá separarse al niño de corta edad de su madre. La sociedad y autoridades públicas tendrán la obligación de cuidar especialmente a los niños sin familia o que carezcan de medios adecuados de subsistencia. Para el mantenimiento de los hijos de familias numerosas conviene conceder subsidios estatales o de otro índole

Principio 7
El niño tiene derecho a recibir educación que será gratuita y obligatoria por lo menos en las etapas elementales. Se le dará una educación que favorezca su cultura general y le permita, en condiciones de igualdad de oportunidades, desarrollar sus aptitudes y su juicio individual, su sentido de responsabilidad moral y social, llegar a ser un miembro útil de la sociedad. El interés superior del niño debe ser el principio rector de quienes tienen la responsabilidad de su educación y orientación; dicha responsabilidad incumbe en primer término, a sus padres. El niño debe disfrutar plenamente de juegos y recreaciones, los cuales deberán estar orientados hacia los fines perseguidos por la educación; la sociedad y las autoridades públicas se esforzarán por promover el goce de este derecho

Principio 8
El niño debe, en todas las circunstancias, figurar entre los primeros que reciban protección y socorro.

Principio 9
El niño debe ser protegido contra toda forma de abandono, crueldad y explotación. No será objeto de ningún tipo de trata. No deberá permitirse al niño trabajar antes de una edad mínima adecuada; en ningún caso se le dedicará ni se le permitiría que se dedique a ocupación o empleo alguno que pueda perjudicar su salud o su educación, o impedir su desarrollo físico, mental o moral.

Principio 10
El niño debe ser protegido contra las prácticas que puedan fomentar la discriminación racial, religiosa o de cualquiera otra índole. Debe ser educado en un espíritu de comprensión, tolerancia, amistad entre los pueblos, paz y fraternidad universal, y con plena conciencia de que debe consagrar sus energías y aptitudes al servicio de sus semejantes.




jueves, 9 de febrero de 2012

Cómo cantar con tanto lamento? Chao Flaco

Como si fuera una explosión, aún no me recupero de la noticia. Ayer murió Luis Alberto Spinetta y creo que este eclipse será permanente. Dudo realmente que algo o alguien pueda aplacar el profundo dolor que provoca esta partida (lo digo por mi).

Recuerdo que hace muchos años, con mi amigo Javier Chacón y el querido Mike Castañeda, disfrutábamos de escuchar los cassetes (cintas magnetofónicas, para que entiendan los jóvenes) de "Almendra", “Pescado Rabioso” y “Spinetta Jade”. Ahora suena en el corazón que:

Maribel se durmio
vamos a cantarle porque se hundio
carrousel,sensacion
de que con el alma nos ve mejor


Canta
canta toda la vida
canta con emoción
y al partir sentirás
una brisa inmensa de libertad

Esto es extraño, ya que Spinetta es una de las personas que nunca me llevaron a pensar en su muerte, pese a que se sabía del cáncer que hace meses lo tenía sometido a dolorosos tratamientos, pero por alguna razón no me transmitía la sensación de muerte que ahora me aprieta el pecho.

Maestro:

Tu dijiste que todas las hojas son del viento y que hay que cuidar con amor este jardín de gente. Intentaremos cantar, aunque no se cómo combinar el escenario con este lamento que moja la pantalla.

Se te extraña, Flaco.

Pedrito Aznar te dedicó (presumo que ya los sabes) las siguientes letras:

Hoy todas las guitarras están de luto. La mía, que tendría que haberse puesto a repasar zambas sólo puede pensar en la tuya, tal vez porque el barro tal vez porque este balcón donde te vi casi por última vez mira una nube de la forma y el color de esas eléctricas con las que soñábamos de chicos.

Este balcón que se quedó... esperando una charla unas palabras o un abrazo más que ya no llegará. Luto también en las palabras habituadas como estaban a que les pusieras cascabeles guirnaldas asonantes o ruedas de tren apocalíptico caleidoscópicos ojos de fértil papel de tu prolífica pluma que suma y resta sílabas del metro patrón de las esferas apenas solas a solas penas.

Adiós que sea A-Dios a sus brazos a ese rincón de magia que seguramente él guardará para los que se animan a jugar con los bloques con los que ha construido el mundo haciendo pequeños nuevos mundos de cuatro minutos donde el corazón se muestra y baila desafiando al vacío.

Adiós mientras me duele el pecho te imagino en viaje por inmensidades más vastas que las del Capitán, pero a diferencia de él sé que tendrás todos los tangos silbados al oído y nunca faltará un mate ni perfume a malvones. En todos nosotros se queda un pedacito tuyo serás inspiración multiplicada por millares a lo largo de los años y lo ancho de las geografías.

Cambiaste nuestras vidas abriéndole camino a la imaginación cantándole salvaje o dulcemente a los misterios que nos habitan al misterio que somos. Adiós. No me resigno a tener que decirlo. Adiós mensajero del infinito.

Pedro Aznar.

miércoles, 8 de febrero de 2012

La Orquesta del Titanic, nueva entrega de S&S

Gran noticia para quienes somos confesos admiradores de estos dos cantautores, Serrat y Sabina nos entregan ahora “La Orquesta del Titanic”, un disco de estudio que hará posible su segunda visita juntos al Perú… hay que alistarse entonces !!!

Según las declaraciones de ambos, el nombre es un homenaje a la orquesta del mítico barco que se hundiera en las gélidas aguas de las costas Terranova (Canadá), el 15 de abril de 1912. Existe una leyenda que dice que la orquesta, compuesta por ocho músicos, seguía tocando mientras el barco se hundía.

En tiempos como los que corren, la metáfora los alcanza - dicen los dos genios - ya que seguir cantando en medio de una crisis global que hunde la nave, resulta heroico.

Estamos a la espera del 4 de diciembre, fecha en la que estarán en Lima. Si seguimos en este mundo estaremos por allá... entre tanto ¿qué tomamos?


viernes, 3 de febrero de 2012

Lapidación de la opinión…

Hace unos días, en su blog “Vano Oficio” - enlace del diario El País de España - el escritor peruano Iván Thays se expresó de modo “incorrecto” de la comida peruana, lo que – como es lógico – le valió una andanada destructiva de críticas e insultos de compatriotas que han sentido vulnerada la vena más sensible de su “marca país”.

Como resulta obvio, entre la vorágine de críticas han tachado al escritor de “don nadie”, “ignorante”, “traidor a la patria”, entre las calificaciones más generosas… algunas otras resultan irreproducibles.

El caso es que Thays emite su opinión acerca del libro “Cocinero en su Tinta” del escritor peruano Gustavo Rodríguez, claro que esa opinión se expande a críticas de ciertos aspectos de nuestra gastronomía nacional.

Personalmente, a mi me gusta nuestra comida y si me hace daño lo atribuyo a ciertas debilidades que no tienen nada que ver con el tipo de platillo, sino con aspectos exógenos que no precisamente son culpa de la cocina. Pero ésos son mis gustos, adquiridos además porque me recuerdan en cada bocado pasajes entrañables de mi vida. La mesa compartida con la familia y los amigos.

Hace muchísimos años, aquí en Cusco, estuve como parte de la organización de un coloquio de literatura en el cual participó Iván Thays. La percepción que tuve de él es la de un muchacho inmensamente talentoso aunque débil de estómago, no olviden que en ese tipo de certámenes todos comíamos en un solo lugar… mientras Blanca Varela, Javier Sologuren o Washington Delgado estaban almorzando o cenando con normalidad, Thays se resistía a probar bocado… una mezcla de mal de altura con indigestión permanente derivaron en su retorno a Lima después de 48 horas. Esa fue la única vez que lo vi.

Leí algunos de sus libros, me gustaron muchísimo “Las Fotografías de Frances Farmer” y “Un Lugar Llamado Oreja de Perro”. Insisto y sumo, talento desbordante y limeñismo puro, pero me siento orgulloso de ser su compatriota y debo decir que estoy en completo descuerdo con esa suerte de lapidación virtual que han cometido con él, todo por expresar una opinión con la cual podemos estar en desacuerdo, pero es su opinión y considero un terrible acto de intolerancia no respetarla. Como si nuestra comida fuera una figura totémica y cualquiera al que no le guste es un blasfemo que merece - por lo menos - el destierro.

Los cocineros peruanos han formado la nueva inquisición. A la hoguera los que no gustan de San Cebiche o Santa Inka Kola, el apedreamiento es nuestro deber, miremos bien nuestras manos, no vaya a ser que estén llenas de proyectiles.

Una vez más repito: Perú, país orgulloso de su comida y avergonzado de sus hambrientos.

Para evitar especulaciones, aquí el enlace del blog de Iván Thays… buscar el post “Con la Tinta aún Húmeda” y su descargo en “¿Porqué Hacen Tanta Bulla?”:

http://blogs.elpais.com/vano-oficio/

A colación transcribo el siguiente poema de Pablo Neruda que me parece oportuno para esta ocasión:


El Gran Mantel

Cuando llamaron a comer

se abalanzaron los tiranos

y sus cocotas pasajeras,

y era hermoso verlas pasar

como avispas de busto grueso

seguidas por aquellos pálidos

y desdichados tigres públicos.

Su oscura ración de pan

comió el campesino en el campo,

estaba solo y era tarde,

estaba rodeado de trigo,

pero no tenía más pan,

se lo comió con dientes duros,

mirándolo con ojos duros.

En la hora azul del almuerzo,

la hora infinita del asado,

el poeta deja su lira,

toma el cuchillo, el tenedor

y pone su vaso en la mesa,

y los pescadores acuden

al breve mar de la sopera.

Las papas ardiendo protestan

entre las lenguas del aceite.

Es de oro el cordero en las brasas

y se desviste la cebolla.

Es triste comer de frac,

es comer en un ataúd,

pero comer en los conventos

es comer ya bajo la tierra.

Comer solos es muy amargo

pero no comer es profundo,

es hueco, es verde, tiene espinas

como una cadena de anzuelos

que cae desde el corazón

y que te clava por adentro.

Tener hambre es como tenazas,

es como muerden los cangrejos,

quema, quema y no tiene fuego:

el hambre es un incendio frío.

Sentémonos pronto a comer

con todos los que no han comido,

pongamos los largos manteles,

la sal en los lagos del mundo,

panaderías planetarias,

mesas con fresas en la nieve,

y un plato como la luna

en donde todos almorcemos.

Por ahora no pido más

que la justicia del almuerzo.