miércoles, 11 de mayo de 2011

Me salva tu AMOR


“En este tiempo descartable y sórdido / donde nos toman siempre por estúpidos / solo me salva tu amor”, cantaba el querido Ignacio Copani, como presagiando esta suerte de incertidumbre colectiva en la que este Perú se encuentra, aunque como es lógico, la situación política actual obliga a sacarse las caretas… algunos de los que se decían democráticos son capaces de apostar por el fascismo oriental de los que nos venden el miedo como pasaje para soportar por cinco (¿o más?) años a Luisa María Cuculiza en alguna cartera ministerial o a doña Martha Chávez declarando que algunos periodistas se auto torturan… o al ya mentado y conocido general Giampetri señalando que en el rescate de los rehenes de la embajada japonesa han habido dos y no dieciséis muertos. El resto es una cojudez diría el Cardenal de la “obra”, ahora primado de la iglesia católica de mi país.
En esta jungla de dimes y diretes electorales, ha habido una maravillosa ráfaga de frescura y belleza… tu llegada a la ciudad de piedra, convirtiendo en una cascada de diamantes el río que tuvo la suerte de mojar tus manos.
Después de tocarte, es posible ir a votar el próximo 5 de junio, y hasta esbozar una sonrisa en la urna.
Este post está escrito para ayudarme a pensar que uno de estos días te volveré a ver…
El paraíso esta donde el viento de tus cabellos perfuma el mundo.
Mejor dejemos la poesía a los que supieron cómo hacerla… José Watanabe y Alejandro Romualdo, en ése orden (fueron peruanos y son buenos):





ANIMAL DE INVIERNO


Otra vez es tiempo de ir a la montaña
a buscar una cueva para hibernar.

Voy sin mentirme: la montaña no es madre, sus cuevas
son como huevos vacíos donde recojo mi carne
y olvido.
Nuevamente veré en las faldas del macizo
vetas minerales como nervios petrificados, tal vez
en tiempos remotos fueron recorridos
por escalofríos de criatura viva.
Hoy, después de millones de años, la montaña
está fuera del tiempo, y no sabe
cómo es nuestra vida
ni cómo acaba.

Allí está, hermosa e inocente entre la neblina, y yo entro
en su perfecta indiferencia
y me ovillo entregado a la idea de ser de otra sustancia.

He venido por enésima vez a fingir mi resurrección.
En este mundo pétreo
nadie se alegrará con mi despertar. Estaré yo solo
y me tocaré
y si mi cuerpo sigue siendo la parte blanda de la montaña
sabré
que aún no soy la montaña.





SI ME QUITARAN TOTALMENTE TODO

Si me quitaran totalmente todo
si, por ejemplo, me quitaran el saludo
de los pájaros, o los buenos días
del sol sobre la tierra,
me quedaría
aún
una palabra. Aún me quedaría una palabra
donde apoyar la voz.
Si me quitaran las palabras,
o la lengua,
hablaría con el corazón
en la mano,
o con las manos en el corazón.
Si me quitaran una pierna
bailaría en un pie.
Si me quitaran un ojo
lloraría en un ojo.
Si me quitaran un brazo
me quedaría el otro,
para saludar a mis hermanos,
para sembrar los surcos de la tierra,
para escribir todas las playas del mundo, con tu nombre, amor mío.


2 comentarios:

  1. Hermosas palabras, las tuyas, Yuri. Y creo que debieras arriesgarte más y deleitarnos con tu ánimo y tu discurrir poéticos.

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  2. Gracias Derik !!!, te mando un abrazo que se extiende por todos los lugares que ambos queremos. Yuri

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